Desde tiempos inmemoriales los seres humanos hemos utilizado el sonido como método terapéutico, también sabemos que tiene un sentido más místico y que el sonido tiene la propiedad de crear y cambiar de estado de ánimo.
Ya en la época de nuestros ancestros más primitivos se conocen instrumentos musicales y cantos con los que las tribus realizaban diferentes rituales. También se utilizaban para llevar la mente a estados de quietud. Hoy en día en Occidente estos métodos se han perdido en su gran mayoría, aunque en Oriente aun podemos encontrar prácticas como el canto de mantras o las practicas sufís, que poco a poco se están incorporando en nuestra sociedad.
La terapia con cuencos de cuarzo va un paso mas allá en la sanación por sonido; está basada en el mismo principio que los cuencos de metal que se llevan utilizando hace siglos en Oriente. Aunque se cree que es muy antiguo, su uso se empezó a divulgar en los años 80, especialmente en EEUU.
La fabricación de los cuencos se realiza a partir del cuarzo en bruto, el cual se funde y se centrifuga a altas temperaturas dentro de un molde. Dependiendo de la forma que tenga este, emitirá una nota y tono diferentes.
Los cristales de cuarzo pueden vibrar u oscilar de una forma regular y tienen una estructura molecular interna en espiral, similar al ADN. Esto hace que los cuencos de cuarzo tengan unas propiedades sonoras únicas. Producen una onda sinusoidal pura y crean un sonido multidireccional que se expande hasta un kilómetro de distancia y que puede durar varios minutos antes de extinguirse, y de forma envolvente ya que en ocasiones parece que viene de adelante, para luego pasar atrás, o del suelo. Es un efecto muy curioso al cual el oído humano no está acostumbrado.
Los que han experimentado su sonido dicen que es algo «mágico», como de otra dimensión. Es un sonido tan especial que no parece de este mundo. Una noche de Luna llena subí los cuencos a la terraza de mi casa, y empecé a tocarlos, al poco tiempo vi que algunos de los vecinos empezaron asomarse y a mirar al cielo, preguntándose de donde venía ese misterioso sonido.
El hecho de que estos cuencos estén construidos con cuarzo no es algo casual, sino que las propiedades que tiene el cuarzo son muy especiales, los indios Cheroqui dicen que «El cristal de cuarzo amplifica los pensamientos y emociones de los hombres que se relacionan con él, es el cristal de la voluntad, el deseo del ser. Con su sola presencia en tu entorno, invoca en ti la voluntad de alcanzar la plenitud, estimulando un proceso de transformaciones en múltiples niveles». También sabemos que los procesadores de los ordenadores están basados en osciladores de cuarzo, que son capaces de manejar y almacenar información.
El entender como sanan los cuencos de cuarzo mediante un explicación es arduo complicado, por que las palabras se quedan cortas frente a la experiencia. El sonido pasa a través de todo nuestro cuerpo haciendo vibrar todas las células las cuales también tienen su microcircuito interno, el cual se excitará hasta entrar en resonancia si es la frecuencia adecuada, ya que cada grupo de células tiene su propia frecuencia de resonancia. Al mismo tiempo estimulamos todas las moléculas de agua del cuerpo, más del 70% de nuestro cuerpo es agua. Un medio altamente conductivo a este tipo de vibraciones y también es capaz de almacenar información. En estudios llevados a cabo por el Dr. Masaru Emoto se ha podido comprobar como el sonido y la intención, afecta a las moléculas del agua.
La gran mayoría de bloqueos energéticos que se producen en el cuerpo se manifiestan a nivel físico con la acumulación de líquido en la zona, esto puede ser debido a la falta de oxigenación, provocada por un gran abanico de malos «hábitos», con la terapia de cuencos de cuarzo, se puede estimular y liberar la zona afectada, ya que la vibración que emiten al frotarlo y/o golpearlo es muy penetrante y envuelve a todos nuestros cuerpos. Para comprobar esto de una forma que podamos observar podemos llenar un cuenco de agua y hacerlo cantar, se podrá observar como el agua empieza a realizar forma geométricas dentro del cuenco, y si continuásemos, subiendo la vibración veríamos como el agua empieza a saltar como si estuviese hirviendo, de esta forma podemos imaginar como el sonido de los cuencos puede afectarnos.
El sonido emitido por los cuencos de cuarzo tiene la facultad de equilibrar nuestro cuerpo energético, activar nuestros centros energéticos (chakras) y limpiar nuestro campo áurico. Para conseguir el equilibrado energético de todo el cuerpo, se debe trabajar con un set de cuencos, en el que cada uno tiene una nota que van desde frecuencias graves, para trabajar los chakras inferiores estimulando el enraizamiento (de los pies hasta el plexo) a las frecuencias agudas, para chakras superiores (del pecho a la cabeza).
A través del sonido y la vibración podemos llevar a la mente a estados de quietud y calma, a otros estados de conciencia que sirven como terapia para sanar problemas de tipo neuronal, al igual como ocurre con la prácticas yoguicas, budistas, sufis… de meditación y aquietamiento mental, que llevan a nuestra mente a un estado paz mediante la escucha interior. La diferencia es que con esta técnica es mucho mas sencillo escuchar los espacios sutiles que se crean en nuestra mente, que cuando realizamos estas prácticas, ya que los sonidos que emiten los cuencos de cuarzo son sonidos psíquicos amplificados.
Escuchar «cantar» a los cuencos transporta a la mente a estados de «no cuerpo» donde realmente desaparece todo lo pesado que hay en nosotros y nos convertimos en algo sutil pudiendo comprender, resolver, perdonar y amar.
La terapia de cuencos de cuarzo puede servir para sanar todo tipo de problemas, contracturas musculares, problemas óseos, dolores en articulaciones, desarreglos digestivos, alteraciones en el sistema nervioso, enfermedades crónicas, insomnio, adicciones, estrés, ansiedad, y un largo etc. Aunque lo realmente interesante es realizar las terapias antes de que se produzca el desequilibrio a modo de crecimiento personal y para liberar las tensiones del día a día. Debemos empezar a cambiar un poco el «chip» e invertir en calidad de vida, y no esperar a que el cuerpo somatice una mala conducta.
La vibración generada por los cuencos también se utiliza para limpiar espacios físicos cargados con energía negativas los cuales se crean en recintos cerrados donde hay gente con continuos pensamientos densos o negativos, como pueden ser hospitales, centros comerciales, oficinas, etc… La energía emitida por los cuencos transmuta estás energías liberando el espacio, tras una limpieza de este tipo se puede observar como la gente cambia su actitud y esta más relajada.
Ahora que has leído este texto, ponlo en duda absolutamente todo y experimenta por ti mismo/a la vibración de los cuencos de cuarzo y vive tu verdad.
Ya en la época de nuestros ancestros más primitivos se conocen instrumentos musicales y cantos con los que las tribus realizaban diferentes rituales. También se utilizaban para llevar la mente a estados de quietud. Hoy en día en Occidente estos métodos se han perdido en su gran mayoría, aunque en Oriente aun podemos encontrar prácticas como el canto de mantras o las practicas sufís, que poco a poco se están incorporando en nuestra sociedad.
La terapia con cuencos de cuarzo va un paso mas allá en la sanación por sonido; está basada en el mismo principio que los cuencos de metal que se llevan utilizando hace siglos en Oriente. Aunque se cree que es muy antiguo, su uso se empezó a divulgar en los años 80, especialmente en EEUU.
La fabricación de los cuencos se realiza a partir del cuarzo en bruto, el cual se funde y se centrifuga a altas temperaturas dentro de un molde. Dependiendo de la forma que tenga este, emitirá una nota y tono diferentes.
Los cristales de cuarzo pueden vibrar u oscilar de una forma regular y tienen una estructura molecular interna en espiral, similar al ADN. Esto hace que los cuencos de cuarzo tengan unas propiedades sonoras únicas. Producen una onda sinusoidal pura y crean un sonido multidireccional que se expande hasta un kilómetro de distancia y que puede durar varios minutos antes de extinguirse, y de forma envolvente ya que en ocasiones parece que viene de adelante, para luego pasar atrás, o del suelo. Es un efecto muy curioso al cual el oído humano no está acostumbrado.
Los que han experimentado su sonido dicen que es algo «mágico», como de otra dimensión. Es un sonido tan especial que no parece de este mundo. Una noche de Luna llena subí los cuencos a la terraza de mi casa, y empecé a tocarlos, al poco tiempo vi que algunos de los vecinos empezaron asomarse y a mirar al cielo, preguntándose de donde venía ese misterioso sonido.
El hecho de que estos cuencos estén construidos con cuarzo no es algo casual, sino que las propiedades que tiene el cuarzo son muy especiales, los indios Cheroqui dicen que «El cristal de cuarzo amplifica los pensamientos y emociones de los hombres que se relacionan con él, es el cristal de la voluntad, el deseo del ser. Con su sola presencia en tu entorno, invoca en ti la voluntad de alcanzar la plenitud, estimulando un proceso de transformaciones en múltiples niveles». También sabemos que los procesadores de los ordenadores están basados en osciladores de cuarzo, que son capaces de manejar y almacenar información.
El entender como sanan los cuencos de cuarzo mediante un explicación es arduo complicado, por que las palabras se quedan cortas frente a la experiencia. El sonido pasa a través de todo nuestro cuerpo haciendo vibrar todas las células las cuales también tienen su microcircuito interno, el cual se excitará hasta entrar en resonancia si es la frecuencia adecuada, ya que cada grupo de células tiene su propia frecuencia de resonancia. Al mismo tiempo estimulamos todas las moléculas de agua del cuerpo, más del 70% de nuestro cuerpo es agua. Un medio altamente conductivo a este tipo de vibraciones y también es capaz de almacenar información. En estudios llevados a cabo por el Dr. Masaru Emoto se ha podido comprobar como el sonido y la intención, afecta a las moléculas del agua.
La gran mayoría de bloqueos energéticos que se producen en el cuerpo se manifiestan a nivel físico con la acumulación de líquido en la zona, esto puede ser debido a la falta de oxigenación, provocada por un gran abanico de malos «hábitos», con la terapia de cuencos de cuarzo, se puede estimular y liberar la zona afectada, ya que la vibración que emiten al frotarlo y/o golpearlo es muy penetrante y envuelve a todos nuestros cuerpos. Para comprobar esto de una forma que podamos observar podemos llenar un cuenco de agua y hacerlo cantar, se podrá observar como el agua empieza a realizar forma geométricas dentro del cuenco, y si continuásemos, subiendo la vibración veríamos como el agua empieza a saltar como si estuviese hirviendo, de esta forma podemos imaginar como el sonido de los cuencos puede afectarnos.
El sonido emitido por los cuencos de cuarzo tiene la facultad de equilibrar nuestro cuerpo energético, activar nuestros centros energéticos (chakras) y limpiar nuestro campo áurico. Para conseguir el equilibrado energético de todo el cuerpo, se debe trabajar con un set de cuencos, en el que cada uno tiene una nota que van desde frecuencias graves, para trabajar los chakras inferiores estimulando el enraizamiento (de los pies hasta el plexo) a las frecuencias agudas, para chakras superiores (del pecho a la cabeza).
A través del sonido y la vibración podemos llevar a la mente a estados de quietud y calma, a otros estados de conciencia que sirven como terapia para sanar problemas de tipo neuronal, al igual como ocurre con la prácticas yoguicas, budistas, sufis… de meditación y aquietamiento mental, que llevan a nuestra mente a un estado paz mediante la escucha interior. La diferencia es que con esta técnica es mucho mas sencillo escuchar los espacios sutiles que se crean en nuestra mente, que cuando realizamos estas prácticas, ya que los sonidos que emiten los cuencos de cuarzo son sonidos psíquicos amplificados.
Escuchar «cantar» a los cuencos transporta a la mente a estados de «no cuerpo» donde realmente desaparece todo lo pesado que hay en nosotros y nos convertimos en algo sutil pudiendo comprender, resolver, perdonar y amar.
La terapia de cuencos de cuarzo puede servir para sanar todo tipo de problemas, contracturas musculares, problemas óseos, dolores en articulaciones, desarreglos digestivos, alteraciones en el sistema nervioso, enfermedades crónicas, insomnio, adicciones, estrés, ansiedad, y un largo etc. Aunque lo realmente interesante es realizar las terapias antes de que se produzca el desequilibrio a modo de crecimiento personal y para liberar las tensiones del día a día. Debemos empezar a cambiar un poco el «chip» e invertir en calidad de vida, y no esperar a que el cuerpo somatice una mala conducta.
La vibración generada por los cuencos también se utiliza para limpiar espacios físicos cargados con energía negativas los cuales se crean en recintos cerrados donde hay gente con continuos pensamientos densos o negativos, como pueden ser hospitales, centros comerciales, oficinas, etc… La energía emitida por los cuencos transmuta estás energías liberando el espacio, tras una limpieza de este tipo se puede observar como la gente cambia su actitud y esta más relajada.
Ahora que has leído este texto, ponlo en duda absolutamente todo y experimenta por ti mismo/a la vibración de los cuencos de cuarzo y vive tu verdad.
Artículo extraido de la Revista Namasté: http://www.revistanamaste.com/el-canto-de-los-cuencos-de-cuarzo/
Doy Gracias a esta magnifica revista por este artículo.
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